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acusatorio, Bioderma, Birgit, inquisitivo, La Clarée Olive, Newline, sentencia previa
En el sistema penal, inquisitivo es el proceso en el que el juez que instruye la causa es el mismo que luego dicta sentencia, a diferencia del acusatorio en que el fiscal acusa y luego de la defensa del imputado, un juez dicta sentencia evaluando las pruebas producidas por las partes.
Sin perjuicio de que ambos procesos son llevados adelante por seres humanos y en consecuencia pasibles de error, parece atinado concluir que ser juez y parte resulta a todas luces inconveniente para el imputado, a quien debe garantizarse la opinión de un tercero imparcial. Sin embargo, por lo general no aplicamos esta garantía cuando se trata de juzgarnos a nosotros mismos.
La noción de pecado, la culpa, la voz de la conciencia, se constituyen en pruebas irrefutables que bastan para que seamos juzgados por nuestro censor interno con toda severidad, sin admitir defensa alguna. Construimos la acusación en base a la evidencia colectada con criterio severo, con el agravante de que la sentencia previa al acto defensista ha sido aprobada por los rígidos cánones imperantes y así el inquisidor se constituye en el único juzgador válido.
El doble rol de juez y parte de nosotros mismos nos llevará también a juzgar a los demás de la misma manera, a dictar sentencia bajo una única perspectiva a la manera del inquisidor: la propia. Y en pos de la evolución personal, es preciso elaborar las resoluciones relativas a cada uno y a terceros en base a algo más que una justicia basada en el exiguo rigor de una sola opinión.
Birgit inspiradora y creadora
Con asiento en los bosques de la actual Gran Bretaña, el pueblo celta tuvo una estrecha vinculación con la magia y la naturaleza. Su cosmología remite a hadas, duendes y hechiceros y la religión se basaba en el culto a los muertos, de manera semejante a los egipcios.
Birgit, hija de Daghda, dios de la magia y la abundancia, representa la inspiración y la curación y es la diosa triple de la poesía, los oficios y los partos cuyo nombre significa brillo o destello. Al nacer, una llama de fuego sobre la coronilla señaló su lugar en el Universo como símbolo de energía flameante y sanadora.
En su carácter de diosa de los poetas recibe el nombre de La Elevada, la musa de la que proviene la inspiración. Su festividad es Imbolc, el momento en que despierta la vida con la proximidad de la primavera, oportunidad en que las mujeres colgaban un paño blanco níveo de un árbol para absorber su poder y consagrarlo a Birgit como talismán.
Es conveniente invocar su energía positiva y sanadora cuando merman las fuerzas o se requiere conectar con el fuego vital de la transmutación; para preparar una meditación con su imagen y música de Lorenna Mc Kennitt conviene dedicarle previamente un mandala. El elegido pertenece al libro de Thomas Varlenhoff, obsequio de mi querida Ale.
Bagaje cosmético
Los cosméticos integran la rutina de atención cotidiana de la piel, esos momentos matutinos y nocturnos dedicados exclusivamente a cuidar del órgano más sensible y expuesto del cuerpo físico.
El tamaño de los envases resulta a veces incómodo para los traslados, así que el empleo de frascos pequeños redunda en dos ventajas: disminución del peso y facilidad del transporte.
Estamos en tránsito hacia la Penísula Ibérica, ese enclave geográfico del continente europeo que siempre deslumbra por la diversidad de los paisajes y la riqueza de su historia. He preparado un kit de viaje para estos días, integrado por crema y aceite para el cuerpo gentileza de Newline, agua micelar de Bioderma y crema de limpieza e hidratante de La Clarée Olive, para prevenir desequilibrios cutáneos devenidos del cambio de clima y horarios, así como de los largos recorridos a pie que emprenderemos por las ciudades elegidas.
Mientras Lorena acompasa la lectura no dejo de pensar en esa primera parte. Parece escrita para mí y mi gigantesco Súper Yo que no calla su voz. Intentaré que padezca afonía mientras dulcifico mis exigencias.
Un beso desde la ciudad plagada de hipotenusas
Gracias por tu visita, Verónica. Y sí, tenemos una voz interior poderosa por fuerza del inconsciente colectivo y de los mandatos; sobre todo las mujeres por tradición patriarcal somos muy duras con nosotras y con nuestro entorno. Es cuestión de tiempo y de conectar con el ser interno que espera, paciente, ser oído.
Un beso desde el madrileño barrio de las Letras (nos bajamos en Atocha, como Sabina).
🙂
Gracias por tu sonrisa, Ruka de colores.
A menudo me reprendo por ser tan crítica conmigo misma…y con los demás,pues termino midiendo con la misma vara al resto que a mi misma. Es una lucha con mi yo soy y mi súper yo soy…aunque ahora mas que antes me doy tregua y me permito errores, voy tratando de dejar atrás esos viejos conceptos inquisitivos. Gracias Bell@ pues siempre tus blog invitan a la reflexión. Disfruten mucho del viaje.Un beso grande.
Gracias por tu visita, Kari. No te reprendas, al hacerlo escuchas al censor una vez más, es tan poderoso que nos cuesta mucho hacer carne que está ahí, acechando, Todos cometemos errores, estamos aquí para aprender y de eso se trata, no podemos escapar a equivocarnos salvo que fuéramos maestros, que no es mi caso así que a equivocarse, rectificar y seguir sin castigo adicional.
Hemos comenzado a disfrutar, ya escribiré al respecto. Un beso para ti desde el madrileño barrio de las Letras.
Del Bagaje cosmético no escribo nada, pues soy un viejo feo, gordo y barbudo, ya nada me arreglaría. 🙂 Pero de la Crónica de la Culpabilidad (Sentencia Previa) y la de Birgit tengo la más excelente opinión. Dos perlas, dan muchas ganas de seguir leyéndote.
Saludos, Bella.
Gracias por tu visita, Ernán, creo que el único bagaje cosmético que no tiene arreglo es interior, y en ese sentido eres millonario en recursos. Gracias nuevamente por tus conceptos, un saludo para ti desde Argentina.